top of page

El cinismo de los sabios, por Mª Elena Moreno.

radiogaroecadenase


Como Jesús, muchos de nosotros nos resignamos para cargar la Cruz, nuestra cruz. Seguimos viviendo aún cuando sabemos donde hay un Judas y aceptamos con gesto condescendiente que nos va a vender. Nuestros ascendientes ya nos advertían de pequeños ¡Si vas por ese camino, si no limas las aristas de tu personalidad, vas a sufrir mucho, cuando crezcas y te enfrentes a la sociedad! Y todo se me cumplió…¡Ya verás! Ya verás!…me decían. Y ya lo vi, lo vi todo y lo seguiré viendo. Tuve un jefe que me auguraba éxito, sólo por mi cara de mártir cuando me sometía a la tediosa tarea de rellenar fichas, y más fichas. ¡Que vería en mi pobre rostro y como traducía el rictus de mi sufrimiento!. El éxito aún no ha llegado… Mas, siento gustirrinín al encontrar frases cínicas, que nos retratan a todos en una u otra área. Es Confucio cuando dijo: «Los ignorantes que estudian sin provecho, los que no hacen el bien, los que no obtienen respuesta satisfactoria, no deben desanimarse, pues deben intentarlo todo mil veces para llegar a ser ilustrado y llegar a ser fuerte.» ¿Qué, te identificas? Yo sí. Me gustaba mucho Séneca cuando aludía a Sócrates, ámbos muy éticos pero también muy cínicos. Los dos dividieron a la humanidad en dos, la plebe y los sabios. Nosotros damos bandazos entre las dos aguas ¡qué cínicos! Adoro a los cínicos.

Comments


bottom of page