Convine con mi familia, en que iba a dedicar ciertos viernes por la tarde, a visitar exposiciones de arte, y que ese tiempo iba a ser todo para mí. Me lo metió en la cabeza mi amigo Fede, yo le debía muchos favores, y quería que le acompañara, así que accedí, de mil amores. Fede me confesó que la mayoría de ellas, pertenecían a panolis con un ego descomunal, que aprovechando la idea del abstracto, se saltaban el trabajo que da ser, un pintor de verdad, y antes de demostrarlo, pasaban directamente a los estridentes rayones y decían que una vez realizada la exposición, ya lo que valía no eran las obras sino la firma, la notoriedad, y la fama, era eso lo que elevaría el precio del cuadro expùesto.. -Melvin, me dijo Fede: yo sólo acudo a las inauguraciones por el solo hecho de inflarme a vino y canapés. Es por lo único que vale la pena perder el tiempo. Mi mujer cocina fatal, mejor dicho, no cocina y cree que yo voy a vivir del aire. -Permíteme que te diga Fede,que a pesar de todo, te entiendo. (Pensé para mis adentros, no sólo cocina mal, sino que es hombruna, fea y gorda. ¿Cómo podrá calzársela? En fin un misterio). -Melvin, hay que comer a velocidad de los que llevan queso, porque tienen alimento. Bueno casi todos están ricos, eso si es bueno el servicio de cáterin, pues cuando lo hace alguien torpe que encima es vegetariano, o lo decora un ezquizofrénico/a, con delirios de artista culinario, nos despedimos y nos vamos, pues esos no saben a nada. -Oye Fede, todos te saludan, parece que todos te conocen, ¿cómo lo haces?. -Primero ojeo las noticias de cultura de todos los diarios, y acudo a la inauguración y luego escribo unas palabras en los diarios como crítico de arte y ellos por su ego y delirios de grandeza, esperando por la crítica, me tratan como si yo fuera un Dios. -Pero Fede tu no eres periodista. -No seas idiota Melvin, yo soy escritor y tengo talento para jugar con las palabras y encontrarles la genialidad por cualquier parte de sus horripilantes obras. Verás, cuando un artista es bueno, posee unas increibles perspectivas de fondo y forma, nunca copia de fotos y nunca interrumpe una imagen como lo hacen los que se ciñen al resultado del producto de una cámara. De los auténticos hay muy pocos. Lo que tenemos en mayoría, son los comemierdas de estos chiflados, que intentan llamar la atención con sus bodrios de niños de cuatro años…Bueno éstos quizás lo hagan mejor. -Fede, llegas a ser cruel. -Sí Melvin, es que yo soy profesor universitario de lenguas muertas, pero en la intimidad, pinto mejor que todos ellos juntos y nunca he expuesto ningún cuadro. -Ya veo, estás frustrado. Bueno, Melvin ya van a abrir la puerta de la sala de exposiciones y tengo mucha hambre, sígueme y haz lo que yo hago, con buenas maneras y escuchando con interés, asintiendo lo que dicen estos idiotas y poniendo la cara como si te hablara un genio, y mientras, no abandones ningún canapé y que no se note cuantas copas de coctail te bebes. Tenemos que salir bien rectos para llegar sin vacilar al aparcamiento. Melvin Zamorano
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